La delgada línea de pasar de comprador a convertirse en receptador de productos robados.
 

Daniela Salgado Parra
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Las denominadas "Ferias de las pulgas" se han triplicado en el último tiempo en las redes sociales. Todo tipo de productos se ofrecen a precio módico a los números seguidos que posee, cada unos de los perfiles en Facebook. 

Desde electrodomésticos, vestuario y útiles de aseo son las ofertas que se suben a cada segundo en la plataforma lo que puede significar una ayuda económica para algunos y una oportunidad delictual para otros. Muchas veces el desconocimiento de la procedencia de éstos hace que su compra revista un peligro.

Tal como el experimentado por cinco personas, hace algo más de un mes, quienes se pasaron de compradores a víctimas, tras concretar un encuentro con un hombre que ofrecía celulares a bajo costo por la red social. 

"Logramos la detención de un par de sujetos que simulaban vender y comprar teléfonos celulares por Internet. Éstos citaban a sus víctimas afuera del Hospital Higueras en Talcahuano, haciéndose pasar por funcionarios y les robaban", detalló el subprefecto de la Brigada Investigadora de Robos, Claudio Vidal.

El delito de receptación está estipulado por el Código Penal en el artículo 456 bis A. En él, se establece que quien conociendo su origen o no pudiendo conocerlo, tenga en su poder especies hurtadas, robadas o de aprobación indebida sufrirá la pena de presidio menor en cualquiera de sus grados y multa de cinco a cien unidades tributarias mensuales.

Por ello, al comprar productos por la web hay que tener presente varios elementos que pueden alertar sobre la real procedencia de éstos y así evitar cometer el delito de receptación.

Un llamado de alerta es cuando el valor está muy por debajo del establecido por el mercado formal y verificar la veracidad del perfil en la red social "muchas veces se cambian el nombre pero el número de contacto es el mismo". 

Sumado a lo anterior, 

hace hincapié al cuidado al momento de concertar una cita. "Ahí pueden ser parte de un delito o también convertiste en víctima de uno".

Para él todos éstos elementos son características a las que se debe poner atención, y agrega: "Las personas están muy acostumbrados y pendientes de las ofertas, pero éstas pueden significar un problema mayor".