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Las razones que explican la crisis que tiene a Sename en tela de juicio

La selección de San Pedro de la Paz se tituló monarca del torneo realizado en Laja y donde participaron los principales clubes del país. Jeanaret Valenzuela y Joaquín Cataldo fueron figuras.

Por: Diario Concepción 24 de Julio 2016
Fotografía: imagenPrincipal-4364.jpg

La denuncia de la muerte de 185 niños en 12 años al interior del servicio destapó problemas históricos y que aún no tienen una solución concreta.

Carolina Abello Ross
carolina.abello@diarioconcepcion.cl

La muerte de la pequeña Lissette Villa en el Centro Galvarino en Santiago, fue sólo la punta del iceberg de la profunda crisis que hoy vive el Servicio Nacional de Menores (Sename), y que se agravó aún más cuando el 11 de julio pasado, el diputado René Saffirio reveló que 185 niños habían muerto en la institución, desde 2005 hasta mayo de 2016, información que obtuvo tras solicitarla vía Transparencia. De ellos, 15 habrían fallecido en 2010.

La información causó conmoción a nivel nacional y motivó que se iniciara una investigación a cargo del fiscal regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, quien el pasado miércoles encabezó una diligencia en la que se ordenó la incautación de computadores y documentos de todas las oficinas regionales de Sename, para investigar las circunstancias de estos fallecimientos. 

Sin embargo, sigue apareciendo información, ya que un informe elaborado por la oficina regional de la Unicef en 2012, el cual fue publicado en diciembre de 2013 con el título "La situación de niños, niñas y adolescentes en las instituciones de protección y cuidado de América Latina y el Caribe", establece que 75 menores fallecieron en 2010, durante el período de cuidado en instituciones de protección en el país. 

Así, habrá que esperar los resultados de la investigación de la Fiscalía. Sin embargo, la crisis ya provocó la salida de la directora nacional del servicio, Marcela Labraña, y de su sucesor, Hugo Herrera. A cargo del servicio quedó la ex fiscal del Ministerio Público, Solange Huerta, a quien la presidenta Michelle Bachelet le solicitó modernizar la institución, tarea que por lo que ya se conoce, tomará mucho más tiempo que el que dura una administración. 

 

Falta de recursos e infraestructura

En abril de 2016, en un reportaje publicado en Diario Concepción, Mario Solar, educador por 6 años en el Centro de Internación Provisoria y Régimen Cerrado de Coronel, reveló la dramática falta de recursos con la que deben trabajar. "El Estado entrega $40 mil anuales para realizar un taller para cada casa, donde hay un promedio de ocho menores. "¿Qué proyecto puedes hacer como educador con esa plata? Ninguno", denunció el trabajador. 

En la visita que realizó la Comisión Interinstitucional de Supervisión de Centros (CISC), presidida por la seremi de Justicia, a los recintos administrados por el Servicio Nacional de Menores, en octubre de 2015, constató que en el centro de Coronel los dormitorios son compartidos, hay baños sin agua, los detectores de humo no operaban, el sistema de iluminación nocturna es deficiente, hay ocho computadores, pero sin conexión a Internet, en un centro que tiene 15 años de antigüedad y que espera una licitación para ser refaccionado.

Sin embargo, Iván Arriagada, presidente regional de la Asociación Nacional de Trabajadores (Antrase), criticó el actuar de algunos parlamentarios, luego de que la crisis del Servicio pusiera a los funcionarios en tela de juicio, precisamente a quienes llevan años denunciando estos problemas y que incluso han sido perseguidos e incluso despedidos por sacar estas necesidades a la luz pública. 

"Yo creo que los parlamentarios están usando a los niños para tener cámara. Yo le diría a esos mismos parlamentarios: cuando el año pasado se les pidió un presupuesto, ¿por qué no se aprobó tal cual se había solicitado, sino que se rebajó? En los hechos concretos, cuando se les ha pedido ayuda para trabajar con los niños, eso no lo hacen", denunció el dirigente. 

Falta de personal y capacitaciones 

Años llevan los dirigentes de las diversas instituciones de Sename denunciando las precarias condiciones en las que trabajan en el servicio, las que, pese a sus advertencias, no se han solucionado y los menores que están al interior del servicio, tanto los que son recibidos por medidas de protección, como los que ingresar por ser infractores de ley, siguen siendo atendidos en precarias condiciones. 

Christian Araya, dirigente nacional de la Asociación de Funcionarios de Sename, aseguró que uno de los principal problemas del servicio es la falta de personal. De hecho, reveló que son 371 cargos que faltan por completar en Sename, a nivel nacional, información que les fue revelada por el mismo ex director nacional del servicio, Hugo Herrera, ante la comisión de Derechos Humanos del Senado. 

"Y cuando falta personal la calidad de atención no es la misma, hay muchas dificultades para armar los turnos, y de esto no se ha hecho cargo ni el servicio ni el ministerio, y ahí están los problemas centrales". Como ejemplo, en el Hogar Capullo de Chiguayante faltan 10 profesionales, para una población de 50 menores. En el Hogar Arrullo de Concepción, la dotación es de 80 funcionarios y hay más de 15 de ellos fuera del recinto, ya sea por licencias médicas o sumarios, los que no son reemplazados o si lo son, es por personas que no tienen las competencias para cuidar a menores, aseguraron dirigentes que trabajan en ese lugar. 

Otro problema que denuncian permanentemente los trabajadores es que no hay capacitación alguna para ellos, siendo que deben hacerse cargo de adolescentes con problemas complejos, como patologías psiquiátricas, abusos sexuales y consumo abusivo de drogas, las que ellos mismos deben controlar en los centros donde permanecen lo menores. 

Casos de alta complejidad

A Sename ingresan menores, ya sea por medidas de protección o por ser infractores de ley, con patologías de salud complejas, trastornos psiquiátricos, consumo problemático y adicción a las drogas, y con vulneraciones graves de derechos en sus propios hogares, como maltratos graves y abusos sexuales. 

Muchos de estos problemas derivan en intentos de suicidio, los que también se han registrado en los recintos de la región del Bío Bío. 

Según un informe elaborado por la Comisión Interinstitucional de Supervisión de Centros (CISC) a los recintos administrados por el Servicio Nacional de Menores, 9 intentos de suicidio registra el Centro de Internación Provisoria y Régimen Cerrado de Menores de Coronel, entre los años 2012 y 2015. 

Y en el hogar Capullo de Chiguayante, los trabajadores denunciaron cinco intentos de suicidio. Por una de estas menores, de 15 años, el senador Alejandro Navarro interpuso un recurso de protección que el viernes ya fue alegado en la Corte penquista.

Los mismos funcionarios y dirigentes han asegurado que las coberturas que tienen los centros no son suficientes para tratar patologías y trastornos de esta complejidad. Sin embargo, esto no se ha resuelto y sería una de las causas de los intentos de suicidio y de fallecimientos de los adolescentes que se atienden en la institución. 

Cuoteos políticos

Los dirigentes de las diversas asociaciones del servicio llevan meses denunciando que dentro de Sename los cargos se están adjudicando a personas por sus militancias políticas y no por sus competencias. 

A modo de ejemplo, en mayo pasado la Antrase realizó un paro de advertencia en el centro Arrullo, criticando a la directora del centro, María José Fernández, ya que aseguran que ella llegó al cargo por compromisos políticos, ya que no fue la mejor evaluada del concurso que se realizó para ese puesto, lo que pudieron comprobar con los documentos que solicitaron vía Ley de Transparencia. 

Christian Araya, dirigente nacional de la Asociación de Funcionarios de Sename (Afuse), insistió en que se está fallando en la conducción del servicio, ya que se ha privilegiado la contratación de directores de centros y de jefaturas técnicas sin experiencia en el área. "Esta administración ha equivocado el camino y dice que deben ser cargos de confianza política y nosotros creemos que tienen que ser personas con experiencia en el tema". 

De hecho, la misma Solange Huerta, el día que asumió el cargo, hizo hincapié en que pidió al gobierno "que esta sea la última designación del Sename. Que no sea más vía designación, sino que este cargo se decida por alta dirección pública. Tiene que ser así, tiene que ser un cargo técnico", afirmó la directora nacional.

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