Los científicos del INIA Quilamapu recomiendan diferentes métodos para proteger los cultivos, frutales e invernaderos y evitar labores al sol durante las horas de mayor calor, las que superarían los 30 grados en la zona centro-sur del país.
El investigador y especialista en agroclimatología de la organización, Raúl Orrego, indica que “de acuerdo con los reportes meteorológicos, para las próximas semanas se esperan cielos despejados y varios días en que las temperaturas máximas superarán las típicas para la época en toda la zona centro-sur de Chile”.
Los expertos del INIA precisaron que, para enfrentar este escenario, es valioso hidratar adecuadamente antes y después de los eventos de calor el suelo como el cultivo para prevenir la deshidratación de plantas como también árboles, especialmente los frutales, al ser los más sensibles al calor.
“Pese a que el año fue seco, existe un alto vigor de la vegetación que se convertirá en material combustible”, advirtió Raúl Orrego. En cuanto a los cultivos en invernaderos, recomendó una ventilación eficiente y utilizar mallas protectoras.
También informan que, en el valle central de las regiones de Ñuble y Biobío, las temperaturas oscilarían entre los 29 y 31 °C durante la siguiente semana, causando estrés térmico en cultivos, hortalizas e invernaderos, arriesgando el trabajo al exterior.
El especialista subrayó la importancia de eludir exponerse al sol en horarios de mayor temperatura, utilizando bloqueador solar cada 15 días, empleando nebulizadores en el caso de grandes superficies o bombas de espalda en las pequeñas, con la intención de proteger el follaje y los rendimientos futuros. Además, releva la utilización de elementos de protección personal como mangas largas, lentes de sol, sombreros y protectores solares.
El investigador Orrego agregó que, frente a las altas temperaturas esperadas para el verano, el riesgo de incendios en praderas, matorrales y áreas forestales aumenta, por lo que implementar medidas de control para reducir la carga de combustible, mantener cortafuegos y prevenir acciones que pudieran iniciar incendios cuando las temperaturas superen los 30 °C “son fundamentales para disfrutar un verano sin incendios forestales ni pérdidas de terrenos verdes”.