¿La carne engorda? Esto dicen los especialistas

Durante años se ha asociado su consumo con aumento de peso, pero los nutricionistas insisten en que la clave está en el tipo de corte, la preparación y las porciones.

La pregunta es recurrente en toda conversación sobre alimentación: ¿la carne engorda más que otros alimentos? Durante años se ha asociado su consumo con aumento de peso, pero los nutricionistas insisten en que la clave está en el tipo de corte, la preparación y las porciones.

De hecho, muchos aprovechan instancias como el Cyber Monday para abastecerse de productos con descuento o revisan la oferta de carnes hoy en busca de cortes frescos y magros. Y es ahí donde surge la duda: ¿qué tan cierto es que la carne, por sí sola, hace subir de peso?

Más proteína que calorías

Uno de los principales aportes de la carne es su proteína de alto valor biológico, esencial para la formación y reparación de tejidos. Este nutriente no solo es fundamental para el crecimiento muscular, sino que también ayuda a generar saciedad, lo que permite controlar mejor el apetito y reducir el riesgo de comer en exceso.

Cortes magros versus cortes grasos

No toda la carne tiene el mismo impacto. Un corte magro de vacuno o cerdo como lomo, posta o solomillo aporta entre 120 y 150 calorías por cada 100 gramos, muy similar a la pechuga de pollo. En cambio, cortes más grasos como costillas o entraña pueden duplicar esa cifra. La elección del corte y la porción es determinante a la hora de cuidar el peso.

Preparaciones que hacen la diferencia

Una carne al horno o a la plancha no tiene la misma carga calórica que una frita en abundante aceite o cubierta con salsas altas en grasa. A esto se suma la diferencia entre carnes frescas y procesadas: embutidos, longanizas y tocino suelen concentrar más grasa y sodio, lo que sí puede impactar negativamente si se consumen con frecuencia.

¿Y el colesterol?

El temor de que la carne eleve el colesterol automáticamente se ha ido matizando con la evidencia. Los cortes magros, en cantidades moderadas, no representan un riesgo significativo para personas sanas. Además, buena parte de la grasa presente en la carne de cerdo o vacuno actual corresponde a insaturadas, más beneficiosas de lo que antes se creía.

Entonces, ¿engorda o no?

La carne por sí sola no engorda. El aumento de peso ocurre cuando la ingesta calórica total supera lo que el cuerpo gasta, sin importar si esas calorías provienen de carne, pan o dulces. Por el contrario, incluir carne magra en la dieta puede ayudar a mantener la masa muscular y prolongar la sensación de saciedad, incluso en planes de control de peso.

Consejos prácticos

• Prefiere cortes magros como lomo, posta o solomillo.


• Modera el consumo de carnes procesadas.
• Cocina al horno, plancha o guiso en vez de freír.


• Acompaña siempre con verduras frescas.
• Mantén las porciones entre 100 y 120 gramos por comida.