Mes de la Niñez: Juego y aprendo todos los días

Valoremos el respeto por la diversidad, comprendamos y reconozcamos las diversas características, orígenes y potencialidades. Volvamos a conectar con niñas y niños, descubriendo nuevas experiencias sin perder la oportunidad de dar cuenta de las múltiples maneras de vivir la niñez.

Karina Villarroel Ambiado
Directora Regional Fundación Integra Biobío

El juego es una actividad fundamental, la más natural y placentera, a partir de la cual se activa el desarrollo y aprendizaje de niños y niñas, potenciando la imaginación y creatividad. Además, es un derecho, un principio pedagógico y uno de los distintos lenguajes que le permiten habitar el mundo, interpretarlo y coconstruir relaciones entre pares y con adultos.

Este mes de la Niñez, en Fundación Integra, celebramos bajo la consigna “Juego y aprendo todos los días”, relevando el protagonismo de niños y niñas, ofreciendo ambientes para el juego libre y espontáneo, procurando que las oportunidades de aprendizaje planificadas por los equipos educativos, sean lúdicas y respetuosas de sus características, brindando los tiempos y espacios que requieren para vivir sus experiencias y ejercer efectivamente su ciudadanía.

Por eso, el Día del Niño y la Niña es la instancia propicia para que los adultos reflexionemos en torno a nuestro rol y a las instancias que presentamos para que ellos y ellas puedan expresar sus deseos y sueños. Hoy, tenemos la posibilidad de celebrar invitándoles a explorar, asombrarse y desarrollar sus intereses.

Procuremos que niños y niñas, día a día y en los distintos contextos en los que se desenvuelven, puedan dar su opinión e intervenir en las decisiones y acciones que los afectan, constituyéndose en agentes de sus procesos, comprometidos con su identidad y el bien común. Este es un ejercicio que promovemos constantemente en los equipos de los 110 jardines infantiles, salas cuna y modalidades no convencionales en la región del Biobío, y en los más de 1200 establecimientos presentes en todo el país, donde los equipos educativos y profesionales de oficina regional, nos preparamos emocional y técnicamente para disponernos a la escucha de sus diversas expresiones.

La invitación es que los adultos dejemos de pensar en una imagen universal, única y homogénea de la niñez. Valoremos el respeto por la diversidad, comprendamos y reconozcamos las diversas características, orígenes y potencialidades. Volvamos a conectar con niñas y niños, descubriendo nuevas experiencias sin perder la oportunidad de dar cuenta de las múltiples maneras de vivir la niñez.