El debate de los humedales

26 de Noviembre 2025 | Publicado por: Editorial Diario Concepción
Fotografía: Cedida | SMA

Independiente de los juicios de valor, el que exista grupos a favor o en contra de esta medida, lo importante es ver que se abren debates sobre estos temas.

Desde hace un tiempo que el tema de los humedales se instaló firmemente en la discusión local.

Es que el Biobío al estar en una zona determinada rica en ecosistemas, dentro del mapa nacional, mantiene un vínculo constante con estos, además del correspondiente conflicto entre el espacio natural y proyectos de invención humana.

Ahora, lo más reciente, es el proyecto habitacional “Loteo Llacolén”, impulsado por Inmobiliaria Pocuro Sur SpA en Coronel, entró en una fase de supervisión luego de que la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) ordenó detener todas las obras asociadas a la etapa IV. La medida afectó a uno de los desarrollos residenciales de mayor envergadura de la comuna coronelina.


El proyecto fue ingresado al SEA en 2018, con una inversión estimada de US$ 43 millones y una planificación de 910 viviendas en cuatro etapas dentro de un predio de 22,11 hectáreas.

La decisión de la SMA se adoptó tras una combinación de denuncias ciudadanas, antecedentes del municipio e inspecciones que contrastaron lo descrito en la RCA de 2019, la cual no consideraba la existencia de un humedal al interior del predio. El hallazgo abrió un flanco ambiental sensible en un territorio donde confluyen humedales como Escuadrón–Laguna Quiñenco y Estero Lagunillas, sectores donde Pocuro ha desarrollado parte de su operación inmobiliaria durante las últimas dos décadas.


El conflicto comenzó a tensionarse a inicios de 2025, cuando la SMA recibió las primeras denuncias por labores de relleno y nivelación en zonas húmedas del predio. Paralelamente, la Municipalidad de Coronel informó de maquinaria realizando escarpes en un sector con acumulación de agua y presencia de fauna, lo que contribuyó a activar la fiscalización formal.

Con esto, el organismo dispuso una inspección en terreno para verificar la magnitud y el carácter de las intervenciones en un proyecto que, según la planificación original, debía completarse en cinco años y cuyas primeras etapas ya se encuentran entregadas.


Independiente de los juicios de valor, el que exista grupos a favor o en contra de esta medida, lo importante es ver que se abren debates sobre estos temas. El hecho que existan humedales en medio de estas iniciativas generan evaluaciones y conversaciones necesarias, en busca de un equilibrio entre lo natural y la edificación.