Cuidemos nuestro bosque nativo

Tenemos una obligación de cuidar lo que beneficia a todos y el parque tiene esa característica.

Un hecho lamentable denunció la Corporación Nacional Forestal (Conaf) tras la tala ilegal de árboles en el Parque Nacional Nonguén.

Y es que ante una situación que atenta contra todos, porque ese espacio está destinado a la comunidad y a las especies que ahí habitan, no se puede sino condenar dichas acciones, destinadas, probablemente, al negocio ilegal de las astillas.

Estas actividades ilegales de tala de bosque nativo fueron detectadas en los sectores Canelo Sur y Los Opazo del Parque Nacional Nonguén, comuna de Chiguayante.

Luego de conocido el ilícito, Conaf presentó una acción judicial, la cual se fundamenta en los antecedentes recopilados por personal de guardaparques y equipos de fiscalización de Conaf, quienes constataron la corta no autorizada de 29 ejemplares de roble (Nothofagus obliqua), dos de aromo (Acacia melanoxylon), un lingue (Persea lingue) y un avellanillo (Lomatia dentata), todos adultos y en buen estado sanitario.

También se evidenciaron daños a la vegetación arbustiva, afectando especies en categoría de conservación como el naranjillo (Citronella mucronata) y el michay (Berberis negeriana). Además, se hallaron huellas de vehículos, restos de basura y rastros de desplazamiento de madera, lo que evidencia un ingreso con fines de extracción ilegal.

Ante estos hechos delictuales, el director regional de Conaf Biobío, Esteban Krause, señaló que “la tala ilegal dentro del Parque Nacional Nonguén es un hecho inaceptable y profundamente indignante. No solo se destruye bosque nativo de alto valor ecológico, sino que se atenta directamente contra un patrimonio natural que pertenece a todas y todos los habitantes de la Región del Biobío. No permitiremos que estos actos queden impunes: hemos redoblado los esfuerzos de vigilancia y pondremos a disposición de las autoridades competentes todos los antecedentes necesarios para identificar y sancionar a los responsables”.

Bajo ese contexto, resulta clave que las personas no adquieran este tipo de maderas nativas u otras, para cualquier fin, dado el antecedente que lo vincula a un hecho delictual.

Tenemos una obligación de cuidar lo que beneficia a todos y el parque tiene esa característica.