Las emergencias permanentes de Alto Biobío

21 de Julio 2022 | Publicado por: Editorial Diario Concepción
Fotografía: Archivo

El Alto Biobío y sus comunidades merecen tanta atención como los grandes centros urbanos de nuestra zona.

La alta cordillera de la Región del Biobío pasa por horas de sumo cuidado. Una vez más las nevazones han generado un manto de preocupación que sus habitantes, a esta altura, viven de manera cíclica cada vez que el invierno se presenta, como es natural, a esta altura del año.

Es que si bien esto genera una oportunidad en sectores como el turismo, hay otro grupo de la población local que observa y resiste el daño en sus actividades productivas ligadas a la cosecha y el ganado.

De ahí que el Ejecutivo determinó, hasta ahora de forma oportuna, la Emergencia Agrícola para Antuco y Alto Biobío. Esta última, una comuna, donde las emergencias son variadas y permanentes.

El miedo a perder ganado o siembra no es la única preocupación con la que deben convivir sus residentes. Los hechos de violencia rural, la falta de conectividad de telecomunicaciones y de accesos se agrupan en una lista de carencias que ya son características de esta tierra.

Si durante estos días la información se ha centrado en la entrega de forraje y la ayuda directa del Estado para usuarios de Indap o particulares, hace solo unas semanas atrás las noticias de esa parte de la Región trataban de cortes en las rutas por desprendimientos de cerros, comunidades pehuenches aisladas y anuncios de soluciones que hasta ahora solo tienen carácter de reiterativas.

Las inquietudes que quedan en torno a Alto Biobío son varias. Quedan dudas como si alguna vez se acabarán estas consecuencias poco gratas cada vez que llega la lluvia o la nieve.

A su vez, y al revisar las acciones de respuesta más inmediatas del aparato gubernamental, otra duda que aparece es si la entrega de forraje da abasto.

Lo seguro es que el Alto Biobío y sus comunidades merecen tanta atención como los grandes centros urbanos de nuestra zona. Hay un deber de reconocer los aportes de un territorio que provee a nuestra Región de grandes postales, turismo, cultura y servicios básicos, del cual todos los ciudadanos del Biobío y sus instituciones de alguna u otra forma sacan provecho sin mayores señas de reciprocidad.

Lo ideal es que en un futuro próximo el Alto Biobío sea solamente sinónimo de una calidad de vida sólida y maravillosa, como fiel espejo de su cordón de montañas.