Malls Chinos: Cámara de Comercio de Concepción pide aumentar las fiscalizaciones
31 de Diciembre 2025 | Publicado por: Edgardo Mora
La proliferación de este tipo de locales viene en alza sostenida. En solo semanas han aparecido más de estos recintos en el centro de la ciudad, incluyendo Avenida O´Higgins.
Quien recorra calles céntricas de Concepción podrá percatarse que, efectivamente, la fisonomía ha cambiado. Lo más reciente, en Avenida O’Higgins, donde por muchos años estuvo la sucursal de un conocido banco, justo frente a la cuadra donde está la Municipalidad, hoy se ve un nuevo Mall Chino.
No se trata de una situación aislada. Lo mismo se repite en varios sectores del casco histórico penquista. Es el caso del edificio que albergó por años a un medio de comunicación y a un tribunal en la intersección de Colo Colo con Freire o la antigua Mansión Urrejola, de Barros Arana esquina Castellón.
Para Sara Cepeda, presidenta de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo A.G. de Concepción el cambio de la fisonomía es solo uno de varios aspectos considerados como negativos por la proliferación de los denominados Malls Chinos.
“Lugares emblemáticos y los metros cuadrados mejor avaluados en el centro de Concepción han sido ocupados por los llamados Malls Chinos donde observamos que existe una competencia desleal respecto del comercio establecido ya que entidades fiscalizadoras tanto del área de la salud como la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) han dado cuenta de una serie de incumplimientos por parte de este tipo de locales”, comentó Cepeda.
Además, dijo, se han detectado inconsistencias en materias como patentes comerciales y del pago de impuestos “debido a que se ha visto la entrega de bouchers que no son boletas y se cambian giros donde se otorgan patentes comerciales por un rubro que luego resultan ser otros. Por ejemplo, se ha fiscalizado la venta de alimentos sin resolución ni inscripción sanitaria o juguetes o artefactos eléctricos mal rotulados o sin la certificación de la SEC”.
Otro aspecto es el que tiene que ver con las personas que trabajan en estos lugares. “No tenemos certezas de que se estén cumpliendo con las normativas laborales vigentes, si es que poseen contrato o si se les paga diariamente. Como Cámara pedimos ley pareja, en el sentido que exista mayor fiscalización para los “Mall Chinos” del centro de la ciudad”, dijo en relación al municipio, autoridad sanitaria, SII, Sernac, SEC.
En cuanto a las posibles soluciones, Sara Cepeda, indicó que han mantenido conversaciones con concejales y funcionarios de la Municipalidad de Concepción sobre la posibilidad de realizar un cambio en la ubicación de los recintos mencionados, de manera de lograr concentrarlos fuera del casco histórico, “como ocurrió, por ejemplo, en Lima (Perú) y se busca implementar también en ciudades brasileñas, de lo contrario, el comercio no solo de Concepción, sino que a nivel nacional, terminará desapareciendo”.
Desde la entidad gremial explicaron también que para el comercio establecido no es llegar y obtener una patente comercial. Si es el rubro alimentos, debe tener resolución sanitaria, certificar la procedencia de sus alimentos (trazabilidad) y además, la Seremi de Salud está permanentemente realizando la toma de muestras. “La gente dice que comprar en los Mall Chinos es más barato, pero no reparan en el riesgo de adquirir productos que pueden no cumplir con la normativa vigente, mientras que el comercio establecido puede tener precios superiores pero que obedecen a los costos asociados a cumplir con todas las certificaciones y autorizaciones requeridas”, manifestó.
Por su parte, Verónica Pinto, dueña de dos locales de la Galería La Hechicera, en pleno centro de la ciudad, “La Rueda”, con 25 años y, “El Conejín”, con más de 40 años de funcionamiento, confirmó que se percibe un efecto negativo en la proliferación de Mall Chinos en el centro penquista.
“Nosotros como pymes del comercio establecido con locales en el centro de la ciudad nos exigen mucho más. Vemos que tienen mucho menos control que nosotros donde se ha detectado la venta de mercaderías sin certificación que son copias o traen estampados marcas conocidas, pero no son directamente originales”, aseveró Pinto.
Pinto cuestionó, además, que “han abierto tantos de estos locales y tienen tanta variedad que la gente les atrae visitarlos. Se trata de importaciones que traen directamente desde China donde no me explico cómo pueden vender tan barato y pagar arriendo en locales inmensos. Cuando uno ve la cantidad de personas que les compran, es un misterio cómo operan para financiar tanto gasto”.
Marcela Ureta, jefa de otro local tradicional penquista como es “Chantilly”, ubicado en el corazón de la ciudad, al interior de la Galería Adauy, con más 25 años de existencia, contó que según sean los productos es el grado de afectación que podrían percibir. “No nos hemos visto tan afectados en algunas cosas porque contamos con un prestigio en cuanto a la calidad de los productos, pero también escuchamos a nuestros clientes que, a veces, nos dicen que determinado producto está más barato en los Malls Chinos, sin embargo, los mismos regresan luego diciendo que las calidades, efectivamente, no son comparables”.
La jefa de local de Chantilly confirmó la sensación de competencia desleal que existe en el comercio establecido. “El año pasado fuimos fiscalizados y se nos cursó una multa por una “villa iluminada” que es parte de una gran variedad de productos navideños que tenemos cada año, donde se nos solicitó su venta solo con pilas para este año, sin un cargador que venía con el producto originalmente, pero en “los chinos” la autoridad fiscalizadora ha detectado varios productos sin certificación como luces navideñas para árboles de navidad, alargadores y adaptadores de energías, pero no hemos sabido de sanciones o multas donde los consumidores por comprar barato no son conscientes del riesgo que corren”.
“La fiscalización no es pareja. Si se va a un Mall Chino las autoridades competentes han detectado la entrega de vales de ventas y no de una boleta, mientras que en el comercio establecido tradicional existe una consciencia de la importancia de entregar la boleta tanto para el cliente que puede volver a reclamar, hacer un cambio o exigir su garantía”, agregó.
Sobre cómo han afectado estos Malls a la imagen tradicional del centro de la ciudad, Marcela Ureta dijo sentir nostalgia de lugares que antiguamente lucían vitrinas especialmente preparadas para las visitas del público penquista y que hoy han desaparecido. “Cuando uno camina por el centro y lo que nos comentan también los clientes al ver cómo han proliferado los malls chinos en el centro, es que extrañan las antiguas tiendas tradicionales con sus vitrinas bien adornadas que contrastan con la presentación de estos locales que, por lo general, se ven más como bodegas y poco espacio para la circulación de las personas. Siento que no aportan mucho a la ciudad”, concluyó.