Inacer 2.0: ¿cómo aportaría a economías regionales actuales?

13 de Junio 2021 | Publicado por: Edgardo Mora
Fotografía: Diario Concepción

Debe ser oportuno, territorial e integrar salud, educación y seguridad, entre otros. Proponen usar datos del SII, inteligencia artificial y Big Data. Hay una experiencia positiva con “IDO” liderada por la UBB en la provincia de Arauco.

Oportunidad y territorialidad. Dos conceptos que se repiten a la hora de analizar un indicador regional como el “extinto” Inacer. Ambas cualidades que podrían ser parte una nueva versión 2.0.

Entre las razones esgrimidas por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) para descontinuar el Inacer consideran las limitaciones metodológicas que enfrentaba la construcción del indicador y su baja correlación con la evolución efectiva de la actividad en cada región, explicaron en su momento desde el organismo.

Adicionalmente, críticos estimaban que tenía discrepancias con el Producto Interno Bruto Regional (PIBr) que emitía el Banco Central.

Sin embargo, los datos regionales que entregaba el instituto emisor adolecían de un desfase de alrededor de ocho meses, careciendo de “oportunidad” para la toma de decisiones.

Carencia de indicadores

Ernesto Guerra, docente e investigador en la Facea de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Uscs) reporta ya en enero de 2020, la carencia de indicadores oportunos de actividad económica regional.

Tras ser consultado sobre los actuales requerimientos de un “Inacer 2,.0”, Guerra es claro. “indicadores que reflejen la actividad económica regional son imprescindibles tanto para un buen diseño de políticas públicas, como para decisiones de los diferentes actores del sector privado”.

Dice que es una necesidad que va un poco más allá de solo pensar en el PIB regional. Pone como ejemplo práctico, el caso de un pequeño o mediano exportador, a quien contar con un indicador de referencia y proyección del precio de su producto, podría mejorar su planificación y productividad, haciéndolo más competitivo.

Además, plantea que “estos indicadores deben ser oportunos, reportar con una frecuencia adecuada y que reflejar la cambiante realidad económica de los territorios”.

Capacidades actuales

Asegura que, con tecnologías como la Inteligencia Artificial, junto con las capacidades actuales de capital humano en la región, se puede generar información útil en la toma de decisiones semanales e incluso diarias, como ocurre en economías pujantes y corporaciones tecnológicas de vanguardia que pueden basar sus daciones en información monitoreada y proyectada en tiempo real.

“Hay meses en que el sector pesca tiene mayor preponderancia en la actividad económica regional que el sector de la construcción, donde hay que considerar variables estacionales donde se deben analizar las influencias de acuerdo al peso relativo respecto del resto”, afirma el académico.

Junto a lo anterior, propone que el Gobierno pueda disponibilidad información en tiempo real en conjunto y en cooperación con el Servicio de Impuestos (SII), respetando la confidencialidad de los datos, y que permitan monitorear, por ejemplo, cuánto está vendiendo el comercio minoritario u otro sector regional determinado..

Luis Méndez, académico de la Universidad del Bío-Bío (UBB) y director del Observatorio Laboral Biobío, sostiene que los beneficios de un Inacer 2.0 serían muchos, “especialmente ahora que se da un paso tan importante con la elección de los gobernadores regionales”.

Permitiría tomarle el pulso a la economía regional sobre todo con un indicador que muestre mes a mes cómo evoluciona, se podría comparar con otras regiones y con los resultados del país, indica el académico de la UBB.

Sobre los aportes de este tipo de métricas, a propósito de la pandemia, considera que “hay otros fenómenos que causan bruscos cambios en la economía como un terremoto, una crisis social, una helada, una sequía. Todos ellos causan profundas contracciones en la oferta y en el empleo, con las consecuencias sociales que ellos significan”.

Integración de variables

Respecto a qué mejoras debiera tener un Inacer 2.0, explica que la tendencia mundial es incorporar elementos más allá de lo estrictamente económico.

En este sentido, señala que el crecimiento y el desarrollo de un país considera aspectos de educación, de salud, de medioambiente, de variables institucionales, de seguridad ciudadana, entre otros, por lo que incorporar en un indicador este tipo de dimensiones sería de mucha utilidad para medir el avance económico de una región.

Construcción de “IDO”

Méndez aprovechó para referirse a la experiencia ganada por la UBB al elaborar el indicador “IDO”, Índice de Desarrollo de Oportunidades en Arauco.

“El año 2020 realizamos, como UBB, un proyecto cuyo beneficiario fue la Gobernación de Arauco que contó con el apoyo financiero de Corfo y consistió en construir un indicador de desarrollo territorial, le llamamos IDO, Índice de Desarrollo de Oportunidades”, destaca el director del Observatorio Laboral BioBío.

El IDO opera en una plataforma digital que muestra en un mapa georeferenciado el grado de desarrollo de las siete comunas de la provincia de Arauco.

Andrés Ulloa, académico y ex decano de la Facea en la Ucsc., concuerda con las posturas anteriores respecto del aporte de un Inacer 2.0 y refuerza la idea de que ayuda con las decisiones de inversión o proyectar un negocio dando mayor certidumbre en tiempos que son particularmente inciertos producto de la pandemia y la insurrección social.

Uso de Big Data

En cuanto a las mejoras, apunta a tres aspectos. Primero, que se correlacione de mejor manera con el PIB regional. Segundo, que incorpore más datos como la variación de los precios y tercero, que aumente su periodicidad o frecuencia.

Adicionalmente, sugiere el uso del Big Data como herramienta para la obtención de lo que se llaman “índices líder” que adelanta información valiosa en el ámbito regional.