Proactividad interna, empatía y flexibilidad han sido claves. Así como la sostenibilidad de propuestas y una coordinación efectiva de la empresa con sus trabajadores.
A casi un mes de cumplirse la implementación del “Paso a Paso Laboral” puesto en marcha por el Ministerio de del Trabajo y Previsión Social, empresarias y trabajadores le toman el pulso al avance del plan en la Región.
Adicionalmente, realizan un balance con las principales ventajas y desventajas según las experiencias de cada empresa.
Lorena Pino, empresaria, gerenta general de Peumayen Ingeniería, destaca que “es esencial planificar y considerar a todos los actores en el proceso de retorno a la normalidad, en nuestro caso no hemos detenido el proceso de fabricación de estructuras, ha disminuido producto de las cuarentenas, cordones y la situación que cada persona vive que indudablemente repercute en el trabajo, pero el mantenernos en funcionamiento nos ha llevado a realizar nuestro propio “paso a paso”, hemos implementado acciones preventivas con horarios diferidos y desinfección permanente del lugar de trabajo”.
La empresaria dice además que “estos son momentos para mostrar empatía, pero también el ánimo y flexibilidad, porque no todos van a responder de la misma manera a esta pandemia”.
Alejandra Bustos, empresaria del grupo Terrae y presidenta del gremio de Industriales de Talcahuano, es enfática en plantear que “desde el sector de la inversión, el “Paso a paso laboral” ha generado algunas interrogantes en el ámbito laboral y social”.
En este sentido, expresa que “en un país que ha mostrado su molestia de modo tan poco urbano no ha sido fácil dirigir, el desorden, las debilidades propias del sistema y de las que surgieron producto de la pandemia, los apetitos de la industria política son los que podrían poner en riesgo la pequeña y mediana empresa”.
Respecto a la experiencia en su empresa, resalta que “en la implementación del plan Paso a Paso Laboral, hemos visto coherencia en las propuestas. Estamos retomando la actividad económica de manera sostenible, ocupados en continuar con los proyectos que veníamos trabajando y que tienen su propia cadencia”.
Héctor Medina, presidente Sindicato 1 de Huachipato explica cómo ha sido la experiencia de los trabajadores, respecto del paso a paso laboral e indica que “la percepción de nosotros los trabajadores de Huachipato es positiva”.
También asegura que “la operación se ha mantenido sin interrupción y este Paso a Paso ha venido a enfatizar que no debemos confiarnos ni relajarnos en las medidas, nos pone en alerta y vigilancia; cada uno es responsable del cumplimiento de la política de salud y seguridad en el trabajo.”
Medina destaca además que “el diseño e incorporación de este protocolo ya está prácticamente implementado al interior de la Usina, basado en un trabajo en conjunto entre Empresa y Trabajadores, incluso yendo más allá de las directrices que establece el plan de acción gubernamental, en la detección, minimización o eliminación de nuestros propios peligros y mejorando continuamente.”
Para Soledad Sepúlveda, jefa de Recursos Humanos de CBB (Ex Cementos Bío Bío) “ha sido fundamental la comunicación permanente con nuestros colaboradores. Hemos trabajado y tomado decisiones, siempre alineados y muy bien coordinados con nuestro sindicato, mutualidades, comité paritario y empresas colaboradoras, fortaleciendo y actualizando de forma permanente nuestros protocolos de prevención, con el fin de resguardar la salud de nuestros trabajadores, clientes y proveedores”.
Para la gerenta general de Peumayen Ingeniería entre las ventajas está el “unirse como grupo de trabajo” y en las desventajas: “comenzar a pensar que estamos en normalidad y eso podría generar un aumento en los contagios”.
En este punto, Bustos, comenta que “hemos visto avances y retrocesos y era lo esperado. Las cuarentenas para disminuir la propagación del virus y las obligaciones de restricción no han sido tomadas por la población con la seriedad que debería, mostrando una falta de madurez cívica que se muestra hasta peligrosa, dificultando de esta manera la transición”.
Por su parte, el presidente del Sindicato 1 de Huachipato considera, entre las ventajas, que el plan es “en pro de evitar largas esperas por las congestiones en los puntos de control sanitario, se modificaron los turnos de trabajo para evitar que el ingreso del personal no coincida con las horas de mayor tráfico”.
También afirma que “cerca del 30% de los huachipatinos trabajan en una modalidad mixta (remoto y asistencia parcial), para asegurar el distanciamiento”.
Desde CBB (Ex cementos Bío Bío), Sepúlveda detalla entre las ventajas el “generar espacios importantes de escucha, conversación y contención para el personal que han sido bien valorados y han permitido seguir avanzando con acciones, en pro de cuidar la salud y dar tranquilidad a nuestros trabajadores”.