El adiós definitivo del forjador de campeones en el canotaje regional

Tras más de una década y media a cargo del alto rendimiento de la especialidad en San Pedro de la Paz, donde formó generaciones de campeones nacionales, el técnico cubano se vio obligado a dar un paso al costado. Las razones las cuenta desde Estados Unidos, donde hoy comienza una nueva vida.

Es con seguridad uno de los entrenadores más importantes que han pasado por el canotaje de la Región del Biobío. En los 16 años que alcanzó a estar en el polo de desarrollo de San Pedro de la Paz, pasaron bajo su mano una larga lista de palistas que llegaron hasta lo más alto del circuito chileno, generaciones de campeones nacionales que supieron representar al país en los más importantes eventos internacionales.

Pero todo tiene su fin, y para Gualberto Mesa, este 2025 marca su inesperada despedida de una Región a la que le entregó cuerpo y alma. “Pensé siempre jubilar ahí, pero la vida quiso otra cosa”, parte diciendo desde Orlando, Estados Unidos, donde hoy se encuentra rehaciendo su vida.

Cerrando un largo ciclo

A comienzos de este año, Diario Concepción daba cuenta de la polémica suscitada por la medida del IND, en conjunto con la federación, de exigir a los entrenadores del programa Promesas Chile repostular a sus cargos, en una etapa crítica para los preparativos de la temporada competitiva. Disposición que afectó a entrenadores de Constitución, Nueva Imperial, y en el caso de Biobío, al polo de San Pedro de la Paz, personalizado en Gualberto Mesa.

Pese a la queja emanada desde los profesionales, la decisión se mantuvo en pie, provocando en el caso de este último, su determinación de dar un paso al costado. “Llamaron a concurso a solicitud de la federación y nos hicieron perder todo el mes de enero. Lamentablemente el IND fue incapaz de defendernos y como yo no quise prestarme para el show, no me presenté a esa entrevista ¿Qué entrevista me van a hacer después de 16 años en el programa? Me molestó en demasía esa falta de respeto”, detalla Mesa.

El cubano, que en su currículo exhibe varios de los mejores números del canotaje chileno, tanto en el plano formativo como competitivo, repasa sus años en la Región. “Es una vida dedicada al deporte de alto rendimiento, con atletas comprometidos 100 ciento, son alegrías que no se borran Y ahora con los años de trabajo, al fin contamos con un gimnasio de primer nivel en el Cendyr. Espero los mejores resultados para los atletas,es un recinto que maduró a dos atletas olímpicos y la gran medallista que es Katy Wollermann como principal figura”, manifiesta.

En la despedida, Gualberto Mesa prefiere guardar todo lo bueno de su trabajo en la Región, aunque no esconde su desazón. “Me quedo con los mejores recuerdos, por más que hoy tengo sentimientos encontrados. Los lazos que me unen al deporte sampedrino son demasiado fuertes, el cariño y el afecto con los atletas y la familia del deporte regional, son muy cercanos. Me da pena dejar tanta gente buena detrás, por eso mismo creo que la institucionalidad deportiva debería tener mayor preocupación por sus entrenadores”, asevera.

¿Opciones de volver algún día? El técnico prefiere dejárselo al destino. “El mundo hoy es un papel, esperemos que pasa más adelante. Por lo pronto, sigo apoyando al club (Náutico Biobío) técnicamente, habrá que buscar oportunidades y avanzar en lo personal; no hay que detenerse”, sentencia.