Briceño se echó al bolsillo a una UdeC que se fue goleada

Venía de un claro triunfo y quería confirmar que no era un oasis en esta mala campaña, pero la UdeC volvió a ser la de antes. Esa que tanto le cuesta en este arranque de torneo. Los de Miguel Ramírez aguantaron un tiempo, pero luego San Felipe desató la tormenta y de la mano de Mario Briceño concretó un 4-1 que fue justo. El Campanil no puede salir del fondo de la tabla.

En la primera etapa los visitantes controlaron a un rival que amenazaba principalmente con los desbordes de Gonzalo Jara por la derecha y que tuvo sus dos ocasiones más claras con un tiro libre al primer palo que sacó Manuel García y una entrada en solitario de Sosa por el centro del área que remató sin fuerzas. Poco más del local versus una UdeC que resistía, pero no atacaba.

Pero en el segundo lapso San Felipe demoró poco en romper el cero gracias a un pase en profundidad de Jara que Briceño controló con el pecho para fusilar a García con terrible mediavuelta a los 48′. Aún no asimilaba el golpe cuando la UdeC vio que Briceño recibía un pase al vacío, se llevó a la zaga en velocidad y aumentó con tirazo colocado a los 52′.

Era la noche de Briceño y a los 67′ consiguió su triplete con un notable derechazo desde fuera del área, todos eran golazos. Y los universitarios vieron una pequeña luz de esperanza cuando Javier Saldías metió una gran cesión a Maxi Pérez y el uruguayo cacheteó el balón de zurda para descontar a los 69′.

Pero por algo la UdeC está donde está. El propio Pérez falló una solo elevando bajo el arco sin portero. Increíble. Y antes hubo una “palomita” de Yashir Islame desviada, también muy en solitario. Si no conviertes esas, poco se puede hacer. Para rematarlos, Enzo Ormeño aprovechó que el rival estaba entregado y aumentó  a los 78′ entrando por la derecha, a pase de Briceño. Pudieron ser más, si no es por García, que sacó tres pelotas más de gol.

La UdeC ha perdido 10 partidos de los 13 que jugó y el próximo sábado recibirá al líder San Luis, desde las 20 horas.