Fútbol femenino de Primera B: ¿hay luz después de un año fuera?
06 de Marzo 2021 | Publicado por: Paulo Inostroza
Huachipato, uno de los clubes que más serio que trabaja en esta serie, ha debido hacer malabares para que no se le vayan jugadoras y continuar un plan formativo que es en grande. Esperan que en junio o julio vuelva la competencia oficial.
“Después de tanto tiempo, teníamos todo listo para volver a entrenar presencial, dos veces por semana. Estaba acordado ya con la gerencia del club y pasó lo que pasó. Otra vez a cuarentena y de vuelta atrás”, comentó Gonzalo Gutiérrez, técnico del fútbol femenino de Huachipato. El 2020 sólo hubo competencia para los equipos de Primera División. El acero ha hecho todo para subir luego, pero no ha tenido torneo para lograrlo.
El DT explicó que “nos hemos visto muy afectados porque no jugamos un partido oficial desde el estallido social. Ya es más de un año. Gracias a Dios, el 99 por ciento de las jugadoras sigue siempre disponible, pero muy ansiosas y entusiasmadas por regresar. Claro que se hace un trabajo en línea, pero no es lo mismo que jugar. Yo tengo fe en la vacuna y que se acabe un poco tanta incertidumbre”.
¿Hubo chicas que por impaciencia pensaron cambiarse de equipo? Gutiérrez señaló que “sí nos ocurrió. Hubo un par de niñas que me hablaron de irse a la UdeC porque querían jugar. Mira, uno no puede obligarlas, pero duele cuando se va una chica que lleva uno o dos años de formación acá. Que la viste cómo llegó y lo mucho que avanzó. Duele, pero ocurre a veces. Yo trato de hacerles ver el buen trabajo que estamos haciendo y que estén convencidas del proyecto”.
¿Y los profes?
Aún sin competencia, el entrenador indicó que “el club se ha portado muy bien con nosotros. Somos 8 en el cuerpo técnico y seguimos todos. Lo mismo que pasó con el Fútbol Joven de Huachipato, donde ni siquiera se han bajado sueldos. Eso genera un compromiso y nosotros creemos en este trabajo que es formativo. No es lo mismo tomar una niña que empieza a jugar en serio a los 18 años, que desarrollar a una jugadora desde los 14. Les enseñas cosas técnicas, pero también hábitos, aprenden la disciplina desde chicas. Yo siempre les digo que acá formamos profesionales para que un día las busquen y tengan un contrato”.
¿Y cómo han sostenido el proyecto durante este largo periodo sin acción? “El año pasado comenzó a funcionar una academia, con más de 60 niñas menores de 14 años. La idea es llegar a 200 y producir jugadoras, pero con estándares altos de calidad, educación. Y creemos que podemos formar y competir al mismo tiempo, por eso teníamos tantas ganas de que se jugara el torneo. Queremos subir, estar con las de Primera”.
De todas formas, aclara que era totalmente lógico suspender la B en el femenino porque “no había clubes preparados para competir, con todo lo que pasaba por la pandemia. Había 8 clubes nuevos, que recién tenían que armarse. Éramos tres apenas los que estábamos en condiciones de competir. No fue que la Anfp no tuviera la voluntad de que jugáramos, no se podía no más. Pero ahora he estado en contacto con ellos y pensamos que en junio o julio podríamos volver a la competencia. Bueno, todo siempre depende de cómo vaya evolucionando lo del virus”.
Por eso siguen trabajando fuerte y con paciencia. “En este año completo sin competencia hemos tenido prácticamente una charla al mes, con Barticciotto, jugadoras en el extranjero… En vez de irse las chicas, me han llamado varias que quieren sumarse. Eso habla bien de este trabajo”, sostuvo.