Las opciones para niños en condición del Espectro Autista que ofrece el sistema alternativo en Concepción

28 de Diciembre 2025 | Publicado por: Cecilia Bastías
Fotografía: Isidoro Valenzuela

La academia valora el espacio flexible de este tipo de escolarización. El Ministerio de Educación recomienda los establecimientos regulados. Mientras que los apoderados de la enseñanza libre manifiestan su conformidad con que sus hijos no sean sometidos a la presión del estándar.

Küme Newen significa en mapudungun buena energía y fuerza para el bienestar y es el nombre de una de las escuelas libres que funcionan en Concepción, es la única dedicada exclusivamente a niños neurodivergentes. En total son 28 niños los que asisten, desde los 3 a los 18 años. Son separados en tres grupos como en las escuelas multinivel.

Su fundadora es Estrella Luarte Quintriqueo, directora y educadora de párvulos, que hace cinco años decidió crear este espacio, contó que cuando su hijo estaba en kínder y prekínder vivió el aislamiento en su escuela por un Trastorno de Espectro Autista que hasta ese momento no había sido diagnosticado.

“Busqué alternativas en Concepción y no encontré. Había colegios especiales, pero no llenaban sus necesidades o terminaba siendo víctima de bullying”, indicó.


La escuela se guía por las bases curriculares del Ministerio de Educación, pero se imparte conociendo en profundidad a cada niño y sus intereses. Al ser la educación un derecho, el Estado exige que los niños asistan a los exámenes libres para comprobar sus avances en el aprendizaje. Estrella Luarte comentó que, al estar considerados como niños con necesidades especiales, podrían solicitar una prueba con adecuaciones. Pero ellos han optado por que sean acompañados por sus profesores, ya que su dificultad central está en lo social.

“A mí me pasan una sala donde nosotros vamos con los profesores, les leen las preguntas y después les dicen que elijan la alternativa. Sin ayudarle, no es decirle la respuesta, simplemente es una forma diferente para el niño, en una situación de estrés, sienta confianza con quien le está tomando los conocimientos”, indicó.


Esta escuela lleva 5 años asistiendo a los exámenes libres y, según indicó la directora del establecimiento, logran buenos resultados, ya que la situación es adaptada a ellos. Sobre los comentarios que han recibido de los apoderados, Luarte mencionó que “la mayoría llegan mal porque han intentado obtener un espacio en sistema tradicional y lamentablemente no funciona. Se sienten diferentes, como si ellos mismos tuvieran discapacidad”.

Para la directora y fundadora de Küme Newen, las dificultades que tiene el sistema tradicional radican en la cantidad de niños que hay y que es complejo que se les preste la atención debida. “Acá tenemos 10 niños por sala, y trabajamos con la metodología Montessori”, dijo.


Nelly Andrades es apoderada de este sistema y señaló que “soy fonoaudióloga, trabajé en el sistema educativo y me pude dar cuenta que ante las necesidades que presentaban mis hijos, ellos no las podían satisfacer, porque los colegios regulares, buscan principalmente la excelencia académica. Ese es su norte, obtener buenos puntajes”.

Ella es madre de mellizos de 5 años que asisten a la escuela. “Les falta estar preparados para atender a niños neurodivergentes, porque su cerebro interpreta, procesa y analiza todo de una manera diferente. Por mucho que se hable de inclusión, que los colegios tengan proyectos PIE, creo finalmente son rezagados” afirmó.


“No quería que a mis hijos se les presionara, no quiero que la escuela finalmente sea un lugar donde vayan a sufrir o donde les hagan bullying. Por eso, verlos reír cuando los dejo con la misma sonrisa cada vez que los retiro lo agradezco. Mis hijos son aceptados, comprendidos y son respetados por sus tiempos”, destacó Andrades.

Academia


El profesor Gonzálo Sáez, doctor en Educación y académico de Facultad de Educación del Departamento de Currículum e Instrucción de la Universidad de Concepción, explicó que en torno a las escuelas libres no existe un consenso y normalmente forma parte de las discusiones que se generan en torno a la Educación. Pero manifestó que es un principio que los sistemas escolares deben ser diversos.

“La educación libre, sin duda, es un aporte. En el Gran Concepción, existen proyectos en diferentes líneas alternativas, existen proyectos enmarcados en estos principios que ofrecen a los niños y a las niñas espacios no estructurados de aprendizaje en comunidad y en sociedad”, describió.


En algunos aspectos, el Dr. Sáez comentó que el sistema escolar tradicional está excesivamente enmarcado y muy tensionado por el avance sobre los planes, programas y las mediciones en las pruebas estandarizadas. “Eso estructura de manera excesivamente rígida tanto el tratamiento que se le da a los temas o las asignaturas junto con la intensidad y el ritmo con que se pasan las materias (…) lo que tiende a perjudicar a los niños y niñas que no forman parte del promedio, ni de esta forma tradicional de acceder al conocimiento”, expuso.

En ese sentido, el académico indicó que observa más beneficios que falencias. “Son una estupenda alternativa y son proyectos de los cuales el sistema escolar tradicional también se pudiese nutrir en la dinámica de sus talleres”, mencionó.


Sobre los niños y adolescentes en condición del Espectro Autista, Sáez manifestó que “el sistema de educación libre ofrecería ventajas por lo débilmente enmarcado y la flexibilidad. Siempre y cuando haya profesionales del área de educación diferencial que apoyen este proceso”.

En otro aspecto, el profesor Gonzalo Sáez destacó los avances que ha tenido la educación pública en Chile que ha puesto profesionales y programas a disposición de acoger a los niños de diversas condiciones. Acotó que “está muy desarrollado en los sistemas escolares públicos”.


En tanto, Dr. Paulo Barraza, investigador del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile, concordó en que no existe una opinión definitiva al respecto. “En términos generales, hay un reconocimiento de la legitimidad de la opción educativa libre, enmarcada en la libertad de enseñanza. Sin embargo, es importante subrayar la necesidad de evidencia robusta que asegure que esta modalidad garantiza los estándares mínimos de desarrollo integral”, puntualizó.

Sobre los beneficios que puede representar este sistema, estableció que “podría radicar en la flexibilidad y la individualización del currículo, favoreciendo mayor motivación intrínseca y el aprendizaje profundo si se aplica correctamente. Además, ofrece una alternativa valiosa en casos donde el sistema formal no logra responder a necesidades muy específicas del estudiante”.


“Para estudiantes TEA, estos sistemas pueden potencialmente ofrecer un marco de estabilidad y seguridad beneficioso, permitiendo regular el entorno sensorial para minimizar la sobrecarga y el estrés, facilitando así la disponibilidad cognitiva para el aprendizaje”, especificó Barraza.

En relación con la postura que debieran adoptar las autoridades en Educación. “Es fundamental que avance hacia una regulación que sea más precisa que restrictiva. La necesidad se centra en establecer mecanismos de aseguramiento de la calidad y de la fiscalización que garanticen el derecho a la educación para todos los menores, independientemente de la modalidad elegida”, apuntó y explicó que eso implica no solo evaluar resultados, sino supervisar el proceso para asegurar que los estudiantes reciban una formación social y curricular, tanto completa como balanceada.


Mineduc

Consultados acerca de la figura que representan las escuelas libres, desde el Ministerio de Educación manifestaron en un comunicado que no existe legalmente este concepto.


“Como Mineduc recomendaremos siempre a las familias que opten por establecimientos educacionales que cuenten con reconocimiento oficial del Estado”, apuntaron. Lo anterior, se explica porque así se asegura que cumplan con los requisitos establecidos por la Ley que regula.

Sobre su funcionamiento, establecieron que “deben contar con un proyecto educativo propio, comprometerse a cumplir con los estándares nacionales de aprendizaje (…) estos establecimientos son susceptibles de fiscalización por parte de la Superintendencia de Educación y pueden acceder a las subvenciones o aportes económicos estatales”.


En el caso de estudiantes con Necesidades Educativas Especiales, los establecimientos con Reconocimiento Oficial que reciben subvención del Estado pueden acceder al Programa de Integración Escolar (PIE), que permite recibir recursos para contratar los apoyos específicos que requieren los niños, niñas, jóvenes o adultos, acotaron.

Finalmente, reafirmaron que “las escuelas ‘libres’ o sin reconocimiento oficial, deben validar los estudios de sus estudiantes mediante exámenes libres, ya que la educación que imparten no es reconocida por el Estado, dado que no aseguran cumplir con los estándares mínimos establecidos para el reconocimiento oficial”.