Parque Pedro del Río Zañartu enfrenta debate por continuidad de proyectos ambientales

Por Montserrat Serra Cárdenas. 

Desde que asumió la nueva dirección del Parque Pedro del Río Zañartu (PRZ), en mayo de este año, se levantaron una serie de cuestionamientos respecto a las decisiones administrativas y la continuidad de proyectos de conservación. 

Extrabajadores denuncian despidos injustificados y un posterior debilitamiento de áreas clave de conservación. Mientras, el director actual, Mauricio Gutiérrez, descarta el cierre de las iniciativas y asegura que el foco está en restaurar y racionalizar la gestión. 

Denuncias de funcionarios antiguos 

Según relató Rodrigo Toledo-Román, exasesor en gestión de humedales y trabajador del Centro del Centro de Flora Nativa del PRZ, tras el cambio de administración “se han disuelto dos áreas de trabajo, y han sido desvinculados de sus funciones por lo menos 10 trabajadores, incluyendo contratos a honorarios, y sin considerar situaciones de renuncia o reasignación de funciones”. 

Una de las áreas más afectadas sería el Centro de Flora Nativa, vivero inscrito en el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), y pilar de proyectos de restauración. 

“En la práctica se ha reasignado o eliminado todo el personal capacitado para la dirección y mantenimiento del centro”, indicó Rodrigo, quien además es representante legal del colectivo Queule, ONG hualpenina integrante de la Mesa de Gobernanza Ambiental de Hualpén (Scam). 

A su juicio, esto compromete la continuidad de iniciativas como el Mirador Laguna Verde y el Humedal Piedra del Agua, que tenían metas de producción de 12 mil plantas nativas esta temporada, incluyendo un piloto de propagación de puya chilensis. 

El exfuncionario advirtió que la conservación enfrenta riesgos adicionales por la presión del turismo y la falta de regulación. “Se puede replantar con nativo, pero el patrimonio genético de la península de Hualpén podría desaparecer”, afirmó, subrayando la importancia de utilizar semillas con procedencia biogeográfica adecuada para no perder la identidad genética de especies locales como el peumo costero. 

Toledo-Román también recordó que el centro coordinaba proyectos de restauración, recibía delegaciones ambientales y escolares, y aportaba a los compromisos de la mesa de gobernanza ambiental. 

“Parte de nuestro trabajo era contribuir en los compromisos adquiridos en la mesa, los cuales también se encuentran en incertidumbre. Dos de las representantes del parque han sido desvinculadas desde mayo. Estamos viendo una situación de abandono de deberes”, sostuvo el ex asesor. 

La defensa de la administración 

Consultado por Diario Concepción, el director del PRZ, Mauricio Gutiérrez, negó que su gestión haya considerado cerrar el Centro de Flora Nativa. “En ningún momento mi administración ha pensado en cerrarlo, nunca. Eso no es efectivo”, aseguró. 

El directivo criticó que la denuncia inicial fuera difundida a la prensa sin pasar por los conductos regulares, lo que, según él, generó confusión. 

Explicó que, actualmente, se evalúa una alianza con la Dirección de Aseo y Ornato de la Municipalidad de Hualpén para fortalecer la producción de especies. “Creo que ambas instituciones podemos ganar, fortaleciendo el centro con la experiencia del municipio. Como contraprestación, pediríamos que nos reproduzcan especies para actividades de replantación”, señaló. 

Gutiérrez detalló que el centro genera un gasto elevado en relación a sus ingresos. “El año 2024 tuvo un gasto anual de alrededor de $56 millones y ventas de plantas por solo $300 mil. Eso inmediatamente da un indicativo de que económicamente es difícil soportarlo”, analizó. 

Sin embargo, esto “no quiere decir que dejemos de propagar especies endémicas, solamente que queremos hacerlo de una forma más racional y eficiente”, añadió el director. 

Respecto a los otros proyectos cuestionados, el director comprometió su continuidad. “Seguiremos cuidando el Humedal Piedra del Agua, que es una iniciativa preciosa, y mejorar las instalaciones del Mirador de Laguna Verde, que encontré en pésimas condiciones cuando asumí”, indicó. 

En su visión, la administración tiene tres prioridades: conservación del medio ambiente, resguardo del patrimonio histórico y proyección turística del parque. 

“Necesitamos que la gente vaya, conozca, disfrute. Esta administración tiene muy claro la conservación, pero también la racionalización de recursos económicos, que no sobran en el parque”, agregó. 

Futuro en disputa 

Mientras la administración plantea un giro hacia la eficiencia financiera, extrabajadores insisten en que la conservación y restauración requieren continuidad y personal especializado. 

Para Rodrigo, lo que está en riesgo es la misión misma del parque: “conservar el patrimonio natural asociado a la biodiversidad de la península de Hualpén”. 

La discusión sobre el destino del Centro de Flora Nativa y de los proyectos ambientales se mantiene abierta. Y es que la propuesta de alianza con el municipio de Hualpén deberá ser revisada en la próxima sesión de la comisión administrativa, según indicó Mauricio Gutiérrez. 

Recordemos que el Parque Pedro del Río Zañartu contempla una extensión de 552 hectáreas. Fue declarado Monumento Nacional en 1976 y perteneció al empresario y filántropo Pedro del Río, quién donó sus pertenencias a la provincia de Concepción en 1918, poco antes de su muerte. 

Actualmente, el Parque se administra por una Comisión Administrativa, presidida por el gobernador regional del Biobío, Sergio Giacaman; compuesta por los alcaldes de Concepción, Héctor Muñoz; y el de Hualpén, Miguel Rivera.