Municipios insisten en regularización para forestales por uso de suelo

Alcaldes y alcaldesas de la Región del Biobío se han manifestado en pro de nuevas leyes que regulen la industria forestal, con el objetivo de delimitar las plantaciones para seguridad de zonas urbanas, rurales y terrenos agrícolas. También insisten en que las empresas tributen a los municipios donde accionan su actividad.

Sebastián Rojas Guerstein

A raíz de la contingencia que azota a la Región, varios jefes comunales se han pronunciado a favor de un plan regulador para las forestales, el cual permitiría delimitar las distancias entre plantaciones de monocultivo y carreteras, zonas pobladas y agrícolas.

Misma historia

Retrocediendo unos años, en 2017, la situación de incendios que afectó a nueve regiones del país fue similar a la que se vive actualmente y, además, se repite la misma historia: el mayor combustible para el avance de los siniestros se concentra en las zonas de plantaciones forestales.

El balance total de aquel verano del 2017, presentado por la Corporación Nacional Forestal (Conaf) en su documento “Descripción y efectos: Tormenta de fuego”, muestra la superficie afectada en el Biobío fue de más de 99 mil hectáreas, más de 15 mil viviendas amenazadas por el fuego y 614 viviendas afectadas.

En el último balance del Comité para la Gestión de Riesgo y Desastres (Cogrid), la situación para la Región era de 187 mil hectáreas quemadas hasta ahora y 430 viviendas destruidas.

Florida

Una de las comunas más afectadas por la “tormenta de fuego” que se presenció en Chile, por primera vez en 2017, en el marco de la aparición de los “incendios de sexta generación”, fue Florida.

Según el alcalde de la comuna, Jorge Roa, luego de que terminara la calamidad, no ocurrió nada distinto con el uso de suelos.

“Tras el 2017 plantaron (las forestales) en los mismos lugares donde se quemó. Siguieron plantando y las plantaciones sobrepasan los cercos que dan a las carreteras. Los cortafuegos siguieron siendo los mismos”.

Añadió que “las forestales retomaron su actividad normalmente, por tanto, no ha habido cambios a alejarse de las carreteras, no ha habido cambio para alejarse más de los centros poblados, sino que ellos tratan de aprovechar al máximo el terreno y plantan indiscriminadamente”.

“Así ha sido siempre, a pesar de que ha habido peticiones al gobierno, a ministros para que se regule de otra manera. (…) Nosotros no estamos en contra de que existan plantaciones, son necesarias porque dan trabajo, pero debe producirse de manera responsable, salvaguardando totalmente la vida humana”, dijo Roa.

Florida cuenta con una superficie de 609 km2, de los cuales, el 66% está con forestación de pinos y eucaliptos. Según el alcalde “el más alto porcentaje corresponde a las forestales, y el mínimo es de pequeños agricultores que tienen una fuente de hectáreas”.

En ese sentido, comentó que espera que se logren medidas concretas para que, por un lado, se regule la actividad forestal, y por otra parte, se le pida por ley a las forestales tributar en las comunas donde accionan.

Nuevas leyes forestales

Roa comentó que “lo que nosotros pedimos es que se regule a través de leyes para que eso sea efectivo, porque qué sacamos con plantearlo los alcaldes una y otra vez, qué sacamos con hablar con parlamentarios, hablar con los gobiernos de turno si nos quedamos solamente en las reuniones y no en las soluciones”.

En la misma línea, la alcaldesa de Santa Juana, Ana Albornoz, expresó que “si nosotros no hacemos algo ahora, si no hacemos algo de fondo vamos a tener incendios la otra semana, el otro mes, en marzo y en abril (…) Entonces es el momento para que la sociedad civil le diga a la industria forestal, que es muy importante para este país, que debe modernizarse y que debe adecuarse a la realidad del cambio climático y a la tremenda escasez hídrica que hay. Esa gran verdad es lo que nosotros hoy día tenemos que construir”.