Rector Carlos Saavedra destaca medidas adoptadas en el marco de las movilizaciones estudiantiles

21 de Julio 2019 | Publicado por: Felipe Placencia
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

Preocupada por el bienestar físico y psicológico de los estudiantes, la institución realiza monitoreo continuo del estado de salud de la alumna y los alumnos en huelga de hambre y presentó un recurso de protección que busca que la autoridad de salud tome las medidas necesarias para poner término a esta medida.

El rector de la Universidad de Concepción, Carlos Saavedra, reflexiona sobre el actual contexto estudiantil. Las movilizaciones han concitado la atención, especialmente esta semana, cuando un grupo de alumnos inició una medida extrema: la huelga de hambre.

La máxima autoridad UdeC analiza la situación con altura de miras, confiado en que el año académico continuará con normalidad porque, como señala, se han tomado acciones concretas para velar por el bien general del estudiantado y de las y los jóvenes que se encuentran movilizados. La mayor parte de las carreras (70) ha finalizado con la programación según el calendario normal y las restantes terminarán su primer semestre el próximo 29 de agosto, de acuerdo con la recalendarización. En este contexto, agradeció a los distintos estamentos, estudiantil, funcionarios y docentes, que han sorteado barreras en el camino para continuar con las actividades académicas.

– ¿Cuál es el estado actual de las movilizaciones en el Campus hasta este viernes?

-En este momento existe un 80% de los estudiantes que culminó su semestre académico con normalidad o que terminarán el 29 de agosto. La mayor parte de ellos ya terminaron el primer semestre y están de vacaciones. Por otra parte, hay una parte importante de carreras que han resuelto retomar sus actividades académicas con la recalendarización definida en conjunto con la Rectoría y los equipos directivos de las Facultades. Con esto se ha dado un proceso de normalización sistemática de las actividades y ello gracias al esfuerzo del cuerpo académico de la Universidad, de los directivos y de los estudiantes que han decidido retomar sus actividades académicas.

– La Universidad de Concepción se ha caracterizado en su historia por forjar estudiantes que presentan una gran conciencia histórica y social. En su calidad de rector, ¿cómo conciliar esta tradición crítica y pluralista con los deberes académicos?

-Hay que recordar que la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción nace meses después de su fundación. De hecho, cumple 100 años en noviembre de este año. Por lo tanto, la organización estudiantil, a través de la FEC, es parte de la historia de la Universidad, del desarrollo integral de nuestra institución. Y los movimientos estudiantiles han estado asociados con demandas sociales importantes de nuestra sociedad y del mundo. Por supuesto que son respetadas y valoradas por su alcance, profundidad y compromiso con la sociedad. Además, con su necesidad de proyección en términos de futuro.

– Se puede decir que como autoridad entiende el sentir de la comunidad estudiantil, ante protestas que son muy variadas en sus temas.

– Es importante señalar que, si bien existe esta tradición, lo relevante consiste en conciliar el interés por las luchas y demandas sociales con la formación de excelencia, que tenemos la obligación de entregar a nuestros estudiantes de las distintas generaciones que se forman en todas las áreas disciplinarias de la Universidad.

Y sabemos que son, en efecto, conciliables, que es lo más importante. Los dos últimos presidentes de la FEC (Claudia Maldonado y Rodrigo Castillo), por nombrar algunos, han sido premios Universidad de Concepción. Esto significa que participaron comprometidamente en la organización estudiantil, en las diferentes demandas a nivel nacional y local. Al mismo tiempo, conciliaron dicha actividad con la excelencia académica, terminando sus carreras a tiempo y también resultando los mejores estudiantes de su generación. Es posible conjugar estos elementos y estamos convencidos de que la participación estudiantil debe estar comprometida en ambos sentidos. Nos interesa que la organización estudiantil se fortalezca a través de las estructuras legítimamente constituidas y reconocidas, con estatutos definidos, que mantengan y consideren la construcción de los pueblos, en sentidos históricos, de cómo vivir los procesos democráticos. Entendemos que el voto secreto e informado es una conquista de los pueblos. Y nos interesa establecer al interior de nuestra Universidad las condiciones para que ello pueda ocurrir en todo momento, en todos los niveles organizativos de la Universidad.

-¿Y de qué forma?

– Para ello implementaremos un mecanismo de votación electrónico. Es un compromiso de esta Rectoría trabajar arduamente para tenerlo durante el próximo año. Tendremos que hacer los ajustes necesarios en nuestro reglamento y estatuto de manera que este tipo de participación pueda ser vinculante y que garantice la toma de decisiones a través de procesos democráticos.

– ¿Este sistema incluso va para la elección de dirigentes estudiantiles?

– De todos los niveles organizativos y universitarios. La idea es ir implementándolo gradualmente y que nos permita la transformación de los reglamentos para cada uno de los procesos.

– Entonces, el mensaje a la comunidad estudiantil es el diálogo y dejar de lado actos de presión.

– Rechazamos todo tipo de violencia. Rechazamos todos los mecanismos de fuerza que se intenten en lugar de búsqueda de distintas soluciones para los planteamientos. Nos parece que es el diálogo el mecanismo para ir resolviendo las problemáticas, pero diálogos conducentes.

Con esto me refiero a que es importante que nuestra institución establezca mecanismos, protocolos, procedimientos al interior que permitan la resolución democrática de los conflictos a través de la construcción de gradualidad. No es posible que grupos pequeños de personas ocupen los edificios e impidan el derecho a la formación y al trabajo de los demás. Esperamos que, mediante un trabajo conjunto con la comunidad, vía códigos éticos de conducta de los estudiantes que entren a la Universidad, podamos ir transformando la cultura organizacional; pero sin perder los elementos históricos de compromiso que han tenido a lo largo de la historia. Es posible conjugar la formación de excelencia con el aporte a los distintos procesos sociales a través de instituciones legítimamente constituidas, con participación y respaldo.

– ¿Cuándo usted habla de esta modalidad de votación electrónica, incluye los debates o discusiones internas del alumnado a la hora de decidirse ante una manifestación?

– Nosotros vamos a proveer un mecanismo que permita la participación en todos los niveles organizacionales. Por lo tanto, va a estar disponible para las carreras, para que todos puedan consultar y así garantizar que todas y todos puedan expresarse libremente, sin coerción.

– Hay alumnos que decidieron como medida la huelga de hambre.

– En el ámbito de la huelga, hay que diferenciar dos temas. Por un lado, la preocupación por las personas y el bienestar de las mismas. En este sentido, las acciones son claras: un equipo de profesionales está monitoreando diariamente las condiciones de salud en que se encuentran. Hasta el día de hoy, ha sido el equipo de la Dirección de Servicios Estudiantiles de la Universidad de Concepción. En los próximos días, será renovado por un equipo diferente, pero con las mismas tareas de llevar adelante este monitoreo. Además de lo anterior, se interpuso un recurso de protección el día miércoles recién pasado. Ya conocido el día de hoy, vamos a generar todos los mecanismos que permitan agilizar la efectividad de este proceso. Por otro lado, debo ser enfático en que no es posible generar diálogo a partir de mecanismos extremos de presión que pongan en peligro la integridad física y psicológica de las personas. El llamado es a la responsabilidad de los dirigentes estudiantiles, a no exponerse a riesgos. Estamos absolutamente convencidos de que tanto el momento como los mecanismos que se han ido construyendo, sea desde las facultades como desde la Rectoría, para ir abordando sistemáticamente esta materia no se condicen con una medida de este tipo. No es posible que se utilicen estas medidas extremas para abordar materias de índole académico.

Nosotros hemos propiciado y participado de mesas de diálogo desde que se iniciaron las movilizaciones estudiantiles y, a partir de ello, muchas carreras fueron retomando sus actividades. Hoy mismo, cuatro carreras resolvieron volver a sus actividades académicas.

En dicho marco, quisiera agradecer a todo el cuerpo académico, a los equipos directivos, a los estudiantes que en algún minuto han sufrido algún evento de amedrentamiento por parte de grupos reducidos de personas, sobre los cuales no tenemos certeza que sean todos estudiantes, que han impedido toma de certámenes, evaluaciones o realización de clases. Doy las gracias –insisto- a la persistencia de las académicas y académicos que comprenden la necesidad de aportar a la transformación cultural a partir de la búsqueda de cambios de conducta que permitan ir construyendo rutas de futuro que garanticen abordar de mejor forma las relaciones al interior de nuestra querida institución.