Boric (1)

Señor Director:

Gabriel Boric vuelve a mostrar una infinita dosis de torpeza y de ingenuidad política nivel Dios. Primero su visita a Palma Salamanca y aquí la guinda de la torta, sosteniendo la polera de un baleado jaime Guzmán. Y lo peor de todo, ahora recula y reconoce el error, pero eso es para la galería. La primera reacción define la esencia, y si hay una cámara delante obviamente no puede ser tan poco inteligente.

Hagamos el ejercicio inverso: a un político de derecha se le entrega una polera con la cara de Catrillanca acribillado y la recibe con una sonrisa. ¿Qué pasaría? Y ojo, yo no soy de derecha, simplemente aquí reflexiono en torno al torpe manejo comunicacional de un personaje que se supone venía a ayudarnos a construir un mundo distinto desde una visión diferente a la dicotomía clásica de izquierda y derecha que nos divide desde ya unos 80 años.

En fin, un político “con futuro” mostrando su plumaje y sumiendo de inconsistencia todo sus discursos pro derechos humanos. No es distinto al resto, seguimos sin liderazgos que puedan darnos esperanzas certeras de un porvenir distinto y mejor.

Paulo Domic