Ciudad

Ucsc recibe superávit de $1000 millones anuales por aportes de gratuidad

Por: Tania Merino 09 de Julio 2017
Fotografía: Carolina Echagüe M.

Varias instituciones en el país han exhibido déficit, pero en la Ucsc el pago por gratuidad aportó nuevos recursos al plantel que busca entrar en una etapa de consolidación

Mientras a nivel nacional el cálculo del financiamiento de la gratuidad significó déficits presupuestarios para varias instituciones, en que, por ejemplo, la Usach notificó pérdidas del orden de mil millones de pesos; a nivel local la Universidad Católica de la Santísima Concepción registró también una diferencia, pero esta vez a favor.

El año pasado los traspasos por gratuidad se tradujeron en un presupuesto adicional de $1000 millones para la casa de estudios, según informó a Diario Concepción el rector del plantel, Christian Schmitz, y para este 2017 anticipa un leve incremento de este monto.

“Tradicionalmente, nuestros aranceles han sido más bajos a los del resto del sistema y los hemos mantenido así porque nuestro alumnado proviene en gran parte de sectores vulnerables. Los reajustes han sido manejados en forma muy cuidadosa”, justificó.

Explicó además que el arancel regulado a nivel nacional prevé mayores costos en las carreras que los valores que exhibe la Ucsc, lo que produce este superávit.

La institución alcanzó 52% de cobertura del beneficio en su matrícula 2016 y durante este año la cifra aumentó en 6 puntos porcentuales, lo que podría influir nuevamente en el margen positivo de fondos.

“Esto hay que contrastarlo con el esfuerzo educativo que realizamos que es mayúsculo en comparación con otras casas de estudios que muchas veces matriculan alumnos que vienen muy bien preparados, con una base intelectual, de estimulación cognitiva y que formarlos como profesionales no requiere de un esfuerzo tan grande como el nuestro”.

Se trata de un aspecto positivo en materia financiera para el plantel que en 2013 sufrió un momento de crisis económica que hoy Schmitz considera superada.

La cifra de endeudamiento bancario se mantiene en $17 mil millones, pero esta vez repactados de 10 a 15 años y con tasas de interés más convenientes. “Las eficiencias logradas permiten superar el mal momento que vivió la universidad, estamos en una situación financiera actual muy saludable”, dijo.

Incluso se están planificando nuevas inversiones al interior del plantel, la más relevante, una cercana a $1.500 millones destinados a lograr la acreditación en una cuarta área: investigación.

Acreditación

Mañana el rector dará a conocer la cuenta anual en el marco del aniversario 26 de la Ucsc desde su separación de la PUC a la que estuvo vinculada por 14 años. Uno de los principales hitos de este informe será precisamente la reacreditación institucional por cuatro años.

Si bien no logró llegar a los cinco años de certificación que se había planteado -en una decisión que de la CNA que fue calificada de injusta por Schmitz-, el plantel mejoró sus indicadores y logró la recuperación de la acreditación en vinculación con el medio que habían perdido en el período anterior. Con esto, la Ucsc vuelve a tener tres áreas certificadas. “Implica un desafío tremendo para llegar a acreditar en el próximo proceso también en investigación”.

También logró la acreditación de carreras del Instituto Tecnológico y hoy “el 60% de los estudiantes cursa en una carrera acreditada”, detalló Schmitz, destacando algunas como Gastronomía Intercultural, Técnico en Parvulario y Técnico en Enfermería.

En su rendición anual, Schmitz abordará además la creación de dos centros de investigación avanzada, el Cibas, liderado por el investigador Antonio Brante, y el Ciede, Centro de Investigación en Educación y Desarrollo liderado por Beatriz Arancibia, ambos en la línea de la excelencia en investigación y orientados a la vinculación con el sector social y productivo.

Planes académicos

Si bien no está en la planificación Ucsc expandir el número de carreras que hoy imparte (que sumando las del Instituto Tecnológico son casi medio centenar), sí hay algunas innovaciones a incorporar. Una de ellas es la próxima apertura de un doctorado en Ciencias, que es uno de los proyectos en los que la institución ha puesto sus esfuerzos para reforzar el área de investigación, y la apertura de programas vespertinos, en los mismas áreas que hoy imparte la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, Facea. “Esperamos que pudiera empezar el próximo año”.

Aranceles

Schmitz también se refirió a la contingencia legislativa frente a la que ha mantenido una postura crítica. Hace unas semanas en el contexto del debate sobre la Ley de Educación Superior se modificaron los criterios de aranceles, en que se estableció una compensación de la brecha negativa para los planteles que sufren pérdidas y que se calcula en base a la acreditación en el área de investigación. Uno de los motivos por los que hoy prácticamente todas las instituciones han dirigido esfuerzos al sector.

“Estimamos que la fórmula ha sido bastante arbitraria, no queda claro el por qué de los porcentajes de asignación de 3, 6 y 12 por ciento. Estamos hablando de un crecimiento exponencial en la determinación de esta composición”.

Schmitz planteó que frente a esta fórmula no queda claro si lo que se busca es financiar investigación. “Se entendía que el arancel que otorgaba el Ministerio era para financiar la formación y la docencia y no para otros temas de investigación y vinculación. Queda la duda de por qué este componente de investigación, entonces, es el que se toma en cuenta para la determinación del arancel”.

Un aspecto que resulta todavía más complejo considerando que la acreditación en investigación no es obligatoria y que aquellos que cuentan con esta certificación son precisamente aquellos ya consolidados “y que no tienen necesidad de nivelarse. Esto va en desmedro de las universidades pequeñas y medianas, sean estatales o no”, concluyó.

Etiquetas